Mantener una relación de pareja sana implica mucho más de lo que a priori pudiera parecer. A los roces habituales de la convivencia y las responsabilidades de la vida adulta toca añadir los celos, ponerse de acuerdo hasta para las cosas más insignificantes y (en ocasiones) la responsabilidad de criar hijos juntos. Todo esto es capaz de pasar factura hasta al más empático, y estas frustraciones acaban notándose en nuestra forma de hablar. Con esto en mente, hoy os traemos algunas pequeñas pautas para mejorar nuestra comunicación en pareja.
Guarda las armas
El primer paso y uno de los más importantes. ¿Cómo va a mejorar vuestra relación si cada conversación empieza con los cuchillos en la mano? Se supone que estás con la persona que quieres; es absurdo afrontar cada nuevo diálogo como una provocación velada.
Cambia las frases de "Tú" por "Me"
A la hora de comunicarnos resulta mucho más efectivo comunicar al otro cómo nos sentimos antes que buscar culpables. Transformar los "Tú me hiciste sentir mal cuando hiciste X" en "Me sentí mal cuando hiciste X" cambia el foco de de la frase, atacando la primera y expresando nuestra percepción en la segunda. No queremos echarle la culpa, sino que comprenda que sus actos nos hirieron para que modifique su comportamiento por uno que no nos cause malestar.
Empatizar
Quizás la conducta más importante. La empatía es la habilidad de ponernos en la piel del otro y analizar la situación desde su punto de vista. Uno de los ejercicios más intereantes a este respecto sería realizar la rutina del otro para experimentar su día a día, aunque a menudo con detenernos e imaginar toda la situación desde el otro lado alcanzamos resultados altamente provechosos.
Tan importante es lo que decimos como el cómo lo decimos
La comunicación no verbal transmite tanta o más información que la verbal, y de nada sirve asegurar a nuestra pareja que nuestro amor tiene tanta fuerza como un volcán si nuestra cara transmite hastío y molestia. Algunas pautas útiles en este sentido serían:
+Mantener contacto visual con el interlocutor
+Emplear un tono cálido y cordial
+Hablar en un volumen audible y claro
+Sonreir y/o usar gestos de acercamiento
Decir lo que queremos
A menudo damos por hecho que nuestra pareja cumplirá nuestros deseos sin comunicárselos en ningún momento. Es importante recordar que, independientemente del tiempo que llevemos juntos o por más que nos conozcamos, nuestra pareja no tiene la capacidad para leernos la mente. Es preferible expresar lo que queremos de manera apropiada (“Me gustaría que fuésemos al cine más a menudo. ¿Cómo lo ves?”) que estar permanentemente enfurruñados porque nuestra pareja nunca nos invita al cine.
Con todo, lo mostrado aquí no son más que unas breves pinceladas sobre uno de los campos más amplios y complejos de las relaciones humanas. Estas son las primeras pautas que se suelen dar en terapia, pero ni muchísimo menos las últimas. En caso de que intentéis ponerlas en práctica para mejorar vuestra relación y no surtan efecto quizás sería el momento de plantear un refuerzo profesional.
Sin más, lo dejamos por esta semana. No dudéis en darle a Me Gusta a nuestra página de facebook para no perder ninguno de nuestros textos.
Guarda las armas
El primer paso y uno de los más importantes. ¿Cómo va a mejorar vuestra relación si cada conversación empieza con los cuchillos en la mano? Se supone que estás con la persona que quieres; es absurdo afrontar cada nuevo diálogo como una provocación velada.
Cambia las frases de "Tú" por "Me"
A la hora de comunicarnos resulta mucho más efectivo comunicar al otro cómo nos sentimos antes que buscar culpables. Transformar los "Tú me hiciste sentir mal cuando hiciste X" en "Me sentí mal cuando hiciste X" cambia el foco de de la frase, atacando la primera y expresando nuestra percepción en la segunda. No queremos echarle la culpa, sino que comprenda que sus actos nos hirieron para que modifique su comportamiento por uno que no nos cause malestar.
Empatizar
Quizás la conducta más importante. La empatía es la habilidad de ponernos en la piel del otro y analizar la situación desde su punto de vista. Uno de los ejercicios más intereantes a este respecto sería realizar la rutina del otro para experimentar su día a día, aunque a menudo con detenernos e imaginar toda la situación desde el otro lado alcanzamos resultados altamente provechosos.
Tan importante es lo que decimos como el cómo lo decimos
La comunicación no verbal transmite tanta o más información que la verbal, y de nada sirve asegurar a nuestra pareja que nuestro amor tiene tanta fuerza como un volcán si nuestra cara transmite hastío y molestia. Algunas pautas útiles en este sentido serían:
+Mantener contacto visual con el interlocutor
+Emplear un tono cálido y cordial
+Hablar en un volumen audible y claro
+Sonreir y/o usar gestos de acercamiento
Decir lo que queremos
A menudo damos por hecho que nuestra pareja cumplirá nuestros deseos sin comunicárselos en ningún momento. Es importante recordar que, independientemente del tiempo que llevemos juntos o por más que nos conozcamos, nuestra pareja no tiene la capacidad para leernos la mente. Es preferible expresar lo que queremos de manera apropiada (“Me gustaría que fuésemos al cine más a menudo. ¿Cómo lo ves?”) que estar permanentemente enfurruñados porque nuestra pareja nunca nos invita al cine.
Con todo, lo mostrado aquí no son más que unas breves pinceladas sobre uno de los campos más amplios y complejos de las relaciones humanas. Estas son las primeras pautas que se suelen dar en terapia, pero ni muchísimo menos las últimas. En caso de que intentéis ponerlas en práctica para mejorar vuestra relación y no surtan efecto quizás sería el momento de plantear un refuerzo profesional.
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